Sofia

Se oyó una risa. Pero no era de alegria, más bien de placer. Pero no de un placer dulce, sino amargo y cruel. Estaba todo manchado de sangre. Se oyó un grito. La risa bajo de tono, despues la risa desapareció. Los dos cuerpos ensangretados en la cama a la mañana siguiente serian revisados por un forense. Toda esta escena la visualiza una niña. Una niña de no mas de seis años, tiene las ropas manchadas de sangre de los cuerpos de sus padres, y las manos atadas. El asesino la obligó a observar la escena. La chiquilla, aun muerte de miedo, lucho. ¿Pero que puede lograr una niña de seis años contra alguien que disfruta matando?

EN EL MES DE FEBRERO (VI)

- Ahora no quiero hablar de eso, Lucia.
- Pero porque, ¿es muy malo?...¿o qué ocurre?
- No te lo voy a contar ahora. No quiero acordarme de Alicia ahora.
Noté que una lagrima rodaba por mi mejilla, ¿qué hombre llora? Lucia se levantó, se sentó a mi lado. Me cogió de la mano y me dijo:
- Desahógate
- Ahora mismo no quiero, en otro momento será.
- Solo quiero ayudarte, si no me lo cuentas no podré.
Quería cambiar de tema. Me acordé de Sergio. Recordé que a las ocho había quedado con el para ir al cine. Miré a Lucia. Pensé que podría ser divertido que ella también viniera.
- ¿Te apetece ir al cine?
Se sorprendió. Pero le gusto la idea, porque en seguida fue a cambiarse de ropa.
Llamé a Sergio. No me lo cogió. Supuse que estaría durmiendo, así que, le envié un sms diciendo que iba a traer a una amiga al cine que no se sorprendiese.
Llegamos tarde al cien. Sergio nos esperaba en frente de la puerta. Iba acompañado de una chica morena de su misma altura, iba vestida con una falda vaquera y unas manoletinas. En seguida supe quien era. Era Sara, la novia de Sergio. Saludé a Sergio, le di un abrazo a Sara. Sara habia sido la mejor amiga de Alicia durante mucho tiempo,comprendia mi dolor y yo el suyo. Aun así se sorprendió de que llevase a alguien y más siendo una chica.
- ¿Qué...?¿Ya te has animado un poco?- me dijo Sergio.
Nos reimos.
- Chicos os presento a Lucia. No os voy a contar como la conocí porque ni ella ni yo nos acordamos- mentí, no queria habladurias.
Lucía les saludó.